Espanhol - Pronombres personales
Carolina Valéria Leon Leite
Pronombres personales
Objetivos
1. Desenvolver competência linguística.
2. Adquirir vocabulário.
3. Recordar e fixar os pronomes pessoais.
Estratégias
1. Peça aos alunos que lembrem quais são os pronomes pessoais em espanhol.
2. A seguir, formando grupos de três elementos, eles devem desenvolver a atividade abaixo.
3. Cada aluno pode, por exemplo, assumir um dos personagens, fazendo a leitura em voz alta.
4. O professor deve corrigir a pronúncia e resolver dúvidas em relação ao significado das palavras.
5. Finalmente, os alunos identificam os pronomes pessoais que aparecem no texto (marcados em vermelho).
Exercício
El pequeño Enrique (fragmento) Narrador: Hola amigos: Yo soy Jorge y estoy aquí para presentaros a un buen amigo mío. Se llama ENRIQUE. Enrique: Hola amigos, yo soy Enrique y quiero ser vuestro amigo. Os explicaré algunas cosas de mi vida. Mi padre se llama Jaime, y mi madre, Micaela. N: ¿Queréis saber más cosas de Enrique? Es el más pequeño de tres hermanos. El mayor se llama Jaime, como su padre, y la segunda, Dolores. E: Ya estoy aquí. N: Hola Enrique, ¿que llevas aquí? E: Es un libro que me regaló mi tía Mariana por mi cumpleaños. N: Ah! Pero, ¿ya sabes leer? E: Si, yo leo este libro de Santa Teresa. Aquí aprendo a ser más amigo de Jesús y me gusta mucho saber cosas de la gran Santa de Ávila. N: Venid, que oiremos una conversación con sus padres. Miquela: Enrique, hijo mío, ¡Cómo me gustaría que fueras sacerdote! E: Pero madre, yo quiero ser maestro. Sr. Jaime: Ni hablar, ni maestro ni sacerdote. Yo quiero que ganes mucho dinero. Tú serás comerciante. N: De momento, Enrique ha de obedecer a sus padres. De manera que la Señora Micaela le prepara las maletas para enviarlo a Quinto de Ebro con su tío. Tiene allí una tienda de tejidos y le enseñará a vender. Enrique, al despedirse de su madre tiene mucha pena, pero obedece a su padre. N: En el pueblo de su tío, Enrique se puso muy enfermo y estuvo a punto de morirse. Un día le dijo su tío: Tío: Cuando te pongas bien nosotros iremos juntos a conocer la Virgen del Pilar. N: Enrique tuvo que volver a Vinebre, su pueblo. Le avisaron que su madre se estaba muriendo y todos querían verla y estar con ella a su lado. Enrique lloró mucho y la cuidó con mucho amor. Micaela, antes de irse al Cielo, le dijo: Voz: ¡Qué alegría más grande me darías, hijo mío, si fueras sacerdote! E: Desde que le sentí estas palabras a mi madre pensé muchas veces en hacerme sacerdote y en lo que me costaría estudiar y conocer a Jesús. N: ¡Cuenta, cuenta lo que te pasó por el camino! E: Iba caminando por las montañas de Montserrat. En el camino me encontré con un chico. Creo que él era de mi edad. Chico: Por favor, dame algo. Tengo hambre y fíjate cómo tengo los pantalones y zapatos. E: No tengo dinero ni llevo comida. Pero podemos hacer una cosa: ¡Te cambio la ropa! Yo quiero ser pobre y no la necesito. N: Y los dos se cambiaron la ropa. ¿Qué os parece? Como vosotros cuando dais cosas o dinero para los necesitados, para los que no tiene comida ni vestidos... Sr. J: Hijo mío, ¿Por qué has hecho esto? E: Perdóneme, padre. Es que no quiero ser comerciante, ni quiero ser rico... Sr. J: ¿Qué quieres, hijo mío? E: Quiero ser sacerdote. Maestro y sacerdote para enseñar a los niños cuánto los quiere Dios. Y decirles que Jesús es el mejor de los amigos. Sr. J: De acuerdo, Enrique, lo que tú quieras, lo que quería tu madre, lo que quiera Dios. N: Enrique creció y ya es sacerdote. Buscaba a los niños para enseñarles, y llegó un momento que a ellos les gustaba más hablar con Enrique de jugar. Se encantaban escuchando sus palabras y haciendo excursiones por las montañas de Vinebre. FIN Fonte: Cuentos infantiles |